En Villa Clara corren tiempos de costureras
Fotos: Ramón Barreras Valdés
A 48 años de creada la Federación de Mujeres Cubanas, las féminas de la Isla y en especial las villaclareñas demuestran que con ellas se puede contar para el desarrollo económico del país.
Con 69 años de vida, Gloria Gutiérrez Rivadeneira decidió iniciar su vida laboral. Durante muchos años acarició ese sueño. Hoy lo ve realizado, aún cuando sobrepase la edad requerida para la jubilación.
«Varios problemas familiares me obligaron a ocuparme de los quehaceres hogareños», explica la más veterana de las costureras en el Consejo Popular General Carrillo, en el municipio villaclareño de Remedios.
Aunque en honor a la verdad, en el poblado no abundan las opciones de empleo para las féminas. Solo ahora, con la apertura de un taller textil de la empresa de confecciones Fénix, es que ellas pueden optar por un trabajo decoroso.
«Me entusiasmó mucho la idea de ser una más aquí —añade Gloria—, así aportaré mi experiencia. Siempre he sido costurera. Muchos habitantes de Carrillo deben conservar alguna ropa hecha por mí. Ahora daré mi aporte a la economía de país. Lo haré mientras tenga fuerzas y salud».
A su lado, Marlen Cortés Martín, 
quien ocupará la primera de las 21 máquinas ubicadas en el taller, opina que se trata de una magnífica oportunidad para que las mujeres del poblado, conocedoras de este oficio contribuyan a sustituir importaciones a partir de la confección de ropa de mezclilla.
«Todos en mi casa, es especial mi esposo, se entusiasmaron cuando les comuniqué que trabajaría en la calle», refiere Marlen. Así advierte que la labor realizada por la Federación de Mujeres Cubanas (FMC) en el proceso de captación no encontró obstáculos y mucho menos posiciones machistas.
La plantilla se complementa con otro grupo integrado por jóvenes que por primera vez se enfrentan a esta labor. Entre ellas se encuentra Felicia Pérez Porra. Sus manos dejarán atrás los callos provocados por la guataca que hasta hace poco manipuló.
«Durante diez años trabajé en el campo. Nunca me he sentado frente a una máquina de coser pero con interés se aprende a hacer de todo», sentencia esta fémina feliz ante el cambio del hazadón por el pedal.
CRECERÁN LAS PRODUCIONES
La apertura de este taller responde a una estrategia de crecimiento de la industria ligera en el país. Sus fines consisten en producir ropa para el comercio en pesos cubanos convertibles (CUC), a través de la red de tiendas que operan en esta moneda. Asimismo, sus producciones se ajustan a las demandas de organismos que requieren confeccionar uniformes como Educación y el Ministerio de las FAR. Por eso en sus comienzos, el taller de General Carrillo será una extensión del existente en Remedios. Posteriormente, cuando se incremente a tres jornadas de trabajo se convertirá en una unidad independiente.
— ¿Existe fuerza laboral suficiente para cumplir ese propósito?
— Sí. Por ahora iniciamos con doble turno porque debemos capacitar durante tres meses, y en cuatro etapas, a quienes nunca han realizado este oficio. Pero contamos con muchas mujeres interesadas y dispuestas a incorporarse, responde Violeta Hernández Martín, la jefa de turno.
— ¿Cuál será el ritmo productivo?
— Desde el lunes 18 de agosto cuando se enciendan las 21 máquinas lo haremos en los horarios de 5:00 a.m. a 1:00 p.m. y de 1:00 p.m. a 8:00 p.m. De este modo elaboraremos hasta 462 unidades diarias.
En diálogo con Víctor Modesto Romero Machado, director de la empresa de Confecciones Fénix en Villa Clara, quien estuvo presente en la inauguración, conocimos que a partir de ahora la cifra de costureras en la provincia asciende a 510. Entre tanto suman cuatro los consejos populares remedianos incorporados a esta industria, pues ya está presente en Buena Vista y Zulueta.
«Vale destacar —refirió Romero Machado— el esfuerzo realizado por los habitantes de General Carrillo para culminar esta obra en 25 días. Los felicitamos y confiamos en que sus mujeres sabrán cumplir con calidad los planes productivos que se propongan.»
2 comentarios
Osmaira -
Aracelys -
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Chely